lunes, 14 de enero de 2008

Volviendo

Vuelvo a todas partes. A cambierme de casa, a la escuela, a firmar papeles en oficinas llenas de burócratas, a estar desempleada, a proponerme cosas y a hacer que sucedan.
Oy vuelvo a la escuela y vuelvo a escribir aquí. Te extrañaba blog. No tenía computadora. Es un caso cuando uno no tiene todo lo que necesita para desahogarse. Un poco ahora escribo por eso. No tengo nada tan interesante qué contarle a nadie, ni siquiera a mí solita, pero vaya que han pasado días en los que lo que más quería era escribir alguna parodia de lo terrible que había sido el trascurrir de esas veinticuatro horas. Absurdo, darkie, lleno de polvo, acompañado de escobas y meadas de un perrito encantador. EL pasar de os días llenos de actividades que ya de lejos parecen hallar un pequeño sentido, un punto de reunión con el resto de mi tragicomedia. Los grandes misterios son para no ser resueltos nunca. La filosofía persecutoria no me angustia tanto cuando puedo llevar a cabo, cumplir sueños, producir trabajo. Pero entonces no va tras de mi el cansado ser o no ser, sino qe aparece una pregunta nueva, menos importante, que no me asusta tanto pero me urge conocer la respuesta. ¿Quién seré cuando sea grande?
No quiero ser grande. Me importa ser y saber quién soy, cómo soy. No sé si me explico. No es una pregunta de esas que uno le hace a su mamá .- ¿Cómo era yo de chiquito mamá?- No. Más bien es un ciego pidiéndole a la persona que más ama que lo describa. No le importaría lo verde o lo pálido, casi no puede imaginárselo. Las cicatrices, los olores, las texturas, la sencilléz, el alma, los pechos. Todo eso en una masa que forma una sola cosa, que el otro la interpreta, la habla, el ciego la escucha, la siente, la reinterpreta. Sólo entonces se ve. Un poco desde afuera, como un viaje astral.
Se me entoja algo así. Necesito pasar a hacer un osote a un escenario vacío y que la´única persona que mire desde las butacas sea yo.
Creo que voy a empezar por ir comprar una cámara de fotos.
* Que no se me olvide volver.

1 comentario:

memoria cuántica dijo...

hola lucía! estuve leyendo tus textos y la verdad que me gustó la musicalidad que tienen. Tu estilo me pareció transparente y cálido. Un gusto leerte.
Te mando un beso cordobés gigante :)
Jose.