martes, 27 de mayo de 2008

Pájaro que brilla:

No siempre se puede ser primavera...
Ha de morir lo que haya nacido.
Brillan las lágrimas y la saliva,
las cucarachas también vuelan.

No brotará lo que no hayas tendido:
equinoccio la marea no tejerá nuestro duelo.
Quedar despierta aunque sólo fuera mi puño,
sin párpado el otoño, sin lengua el alfarero.

Antes, tendría que infectarse todo lo inmune:
el agua brilla en el fondo de un pozo seco.
Así como el barro ha fraguado en ladrillo,
también en la almohada han quedado los sueños.

Hazte estambre, Pájaro que brilla, abrígate en mi pluma,
recuéstate en mi apéndice.
Brilla también el hielo... vuela tu nido y vuela lejos.

2 comentarios:

L. O. T. dijo...

in-cre-í-ble mente guau. Gracias.

Me gusta que sólo yo te conozca, me ruboriza que voltees a verme o no sé, temo un desencanto -si es que hubo alguna vez encanto- Saludos y felicitaciones.

Jesús dijo...

¿Qué otra cosa es la vida, sino partir lenta y atinadamente?